A todos nos ha pasado alguna vez estar hablando con alguien y ver como esa persona saca su teléfono móvil para enviar un mensaje, entrar a comprobar sus redes sociales o simplemente por inercia.

El phubbing, o “ningufoneo” en castellano, es el acto de ignorar a tu entorno y a aquellos que están a tu alrededor por estar pendiente de tu teléfono móvil o cualquier otro dispositivo tecnológico.

Todos tenemos ese clásico amigo o amiga que está en Instagram mientras tú le estás contando algo, y si no lo tienes, es que eres tú y estás hecho un auténtico phubber.

 

¿A qué se debe el aumento del phubbing?

La tecnología está cada vez más y más presente en nuestro día a día en distintos ámbitos y aspectos; desde que nos despertamos hasta que nos acostamos estamos rodeados de tecnología y aparatos electrónicos, especialmente nuestro teléfono móvil. De hecho, datos revelan que1 de cada 3 personas mira el móvil más de 100 veces al día, lo que significa que miramos el móvil una media de 1 vez cada 10 minutos sin contar las horas de sueño. El 25% de los menores de 25 años lo mira una media de 150 veces al día (1 vez cada 7 minutos).

“Y es que es indiscutible que la práctica del phubbing aumenta a medida que incrementa la adicción de las personas a su teléfono, también conocida como nomofobia (no-mobile phone phobia) o miedo a estar sin móvil o a la desconexión “el 65% de los españoles volvería a casa a por el móvil si se le olvida. El 75% en el caso de los menores de 25 años.”

Phubbing

 

Efectos negativos

Nos hemos acostumbrado a que nuestro teléfono se ilumine, vibre o directamente emita un sonido cada vez que recibimos una notificación, pero debemos poder tener el control sobre nuestro móvil y saber diferenciar cuando podemos hacerle caso y cuando no, ya que no debemos olvidar el entorno que nos rodea al cual puede resultarle una falta de respeto… De hecho, el origen de phubbing proviene de la unión de phone (teléfono) y snubbing (despreciar). Debemos ser empáticos y recordar que a nadie le gusta sentirse despreciado por sus seres cercanos ni sentir que lo que nos cuentan no nos interesa, así que aunque el vídeo que te ha salido en Instagram de un cachorro sea muy interesante, puede esperar.

El distanciamiento social de personas queridas es uno de los posibles efectos negativos del phubbing, puesto que al estar inmersos en nuestro teléfono conectados con otras personas, nos estamos perdiendo la oportunidad de conectar con aquellas que tenemos al lado.  Otra consecuencia del phubbing es la pérdida de capacidades para socializar de quienes lo practican: actualmente los jóvenes afirman que les resulta más fácil entablar una conversación a través de internet que cara a cara.

¿Cómo podemos evitarlo?

En primer lugar, es fundamental tomar conciencia de nuestro entorno y saber que a no ser que se trate de una urgencia debemos evitar coger el teléfono en presencia de otros. Además, otros tips que podemos seguir para desconectar del móvil cuando estemos con otras personas son:

  1. Silencia tus notificaciones provenientes de redes sociales; si alguien necesita algo importante sin duda te llamará.
  2. Cuando estemos con amigos o en reuniones familiares, algo que podemos hacer es apilar todos los móviles de los presentes en medio de la mesa. Para darle emoción podéis convertirlo en una apuesta: el primero que coja el teléfono sin motivo aparente paga la cuenta.
  3. Habla sobre el phubbing. Esto puede servirte tanto a ti como a quienes te rodean para tomar conciencia de lo que podéis perderos por estar con el móvil en lugar de disfrutar de la compañía del otro.

 

Como en la mayoría de ocasiones que requieren de un cambio, este empieza en uno mismo. Se trata de desconectar para volver a conectar.